viernes, junio 29, 2007

Baseball

Hace un par de semans atrás, y por primera vez desde que estamos viviendo en Estados Unidos, fuimos al estadio a ver un partido de baseball. Fuimos parte de los más de 42.000 personas que había en el estadio (chico para los estándares de acá) junto con cuatro amigos (uno de ellos americano para que nos explicara lo que estaba pasando en la cancha) a ver a los Philadelphia Phillies jugar contra los Detroit Tigers.
En definitiva este no es el deporte más emocionante de la tierra, es lento, lento, lento, y al minuto que pestañeas alguien batea un home run, así que hay que estar pendiente de todo, aunque sea latero. Por suerte nuestras expectativas no eran demasiado altas, así que terminamos pasándolo bastante bien.
Y que me perdonen los fanáticos de este deporte, pero yo creo que más allá del partido en sí (que perdieron los locales, por si a alguien le interesa) ir al estadio es más bien una ocasión social, tienen música en vivo, venden montones de comida (chatarra, obvio) y también cerveza! (al doble de lo que cuestan, por supuesto) y todo el mundo va con ánimo de pasarlo bien, desde parejas de abuelitos a mamás con niños y obviamente algunos "econ nerds".
Igual fue entretenido, iría de nuevo, pero debo reconocer que sobreviviría si mañana alguien me dice que nunca más puedo ir al estadio a ver baseball. Estoy segura que el football debe ser mucho mejor, imposible conseguir entradas eso sí, pero de todas formas, esta temporada que vinene lo vamos a intentar...I'm feeling lucky.

No hay comentarios.: